Planificando mis Deudas

Cada año nos trazamos metas. A nivel financiero, no es la excepción. Pero así mismo, nos enfrentamos a la interrogante: ¿Cómo poder alcanzarlas? La respuesta puede ser simple o compleja, dependiendo la situación financiera de la persona que se proponga los objetivos.

Aquí pretendemos cambiar un poco la visión que regularmente tienen los que ven la planificación como algo difícil y en muchos casos, imposible de lograr.

La planificación es poner en contexto la realidad de nuestras aspiraciones. En lugar de pensar que planificar solo sirve para adquirir cosas, pensemos que la planificación nos ayuda a poner cosas en orden.  

Los pasos de una buena planificación financiera son:

• ¿Qué necesitas? (Objetivo). Definir cuál es tu aspiración. Es el paso principal para iniciar la planificación de manera correcta. 

• ¿Qué cuesta ese objetivo? No solo el costo financiero de la meta, sino, cuáles cosas tengo que sacrificar para poder alcanzarla.

• Plazos de la planificación. Establecer en qué periodo, alcanzarás el objetivo fijado. Esos plazos pueden ser trimestrales, semestrales o anuales, dependiendo de la magnitud de la planificación. 

• El plan de acción. Regularmente es la parte más difícil de lograr en la planificación, pues conlleva desprenderse de hábitos y comportamientos, lo que implica una alta cuota de disciplina. En el plan de acción sale a relucir que tan dispuestos estamos a renunciar a aquellas cosas que creemos beneficiosas, pero identificamos que en realidad nos perjudican mucho más. 

• Saber mi situación financiera. ¿Dónde estás parado a nivel económico? ¿Cuál es tu nivel de ingresos? ¿Cómo andan tus deudas? ¿Qué camino llevan tus gastos?

• ¡Menos es más! Al planificar debes comenzar con pasos de bebé, lentamente para luego ir afianzando tus proyectos. No todo se logra en 24 horas. 

• ¡La buena actitud lo es todo! No basta con intenciones para planificar. Una actitud firme en tus objetivos te dará los resultados esperados. 

Regularmente, se recurre al endeudamiento para poder lograr algunas de nuestras metas. Sobre todo, cuando se trata de metas a mediano y largo plazo.

Aquí compartimos algunos renglones en los cuales se asumen compromisos financieros con mayor frecuencia y cómo podemos administrar efectivamente esas deudas.

Préstamos personales. Se recurre a préstamos personales para la compra de bienes duraderos que implican la erogación de una suma considerable de dinero, tales como vehículos, electrodomésticos, entre otros.

Recomendaciones

• Trata de ahorrar para crear un buen inicial, con el objetivo de financiar menos capital. 

• No excedas los 3 años de crédito en un préstamo personal. En el caso de un vehículo, lo máximo debe ser 5 años. 

• Realiza pagos extraordinarios a tu préstamo. Así tu cuota disminuirá y el préstamo al final tendrá un menor costo para usted.

Crédito educativo. Es una figura financiera que ha experimentado un aumento en su demanda. A medida que las personas concluyen sus estudios universitarios básicos, lo requieren para poder costear posgrados, maestrías y demás. 

Recomendaciones

• Antes de tomar el crédito, oriéntate sobre el costo de la carrera, maestría o posgrado que estudiarás. En el costo también incide, la institución en la cual cursará los estudios.

• Procura solicitar una beca.Las becas pueden ser una opción viable al momento de solicitar un crédito educativo, pues así financiarías un monto menor de la carrera.

• Si vas a realizar estudios fuera del país, dentro del costo total, es importante que agregues los costos de alojamiento y manutención.

Vacaciones. No se recomienda que se financien las vacaciones. Algunas personas lo hacen, pero en realidad no es un crédito saludable.

Recomendaciones

-Opta por un club de viajes, en el que puedas ir abonando a tu cuenta, hasta cubrir el costo de las vacaciones. 

-Programa un plan de ahorros que evite endeudarte para tomar esas vacaciones anheladas. 

-Si tienes tarjeta de crédito, investiga si tu entidad financiera ofrece un plan de beneficios de vacaciones relacionado a este producto.

Es importante tener en cuenta, que toda buena planificación crediticia, inicia con información, la cual nos ayudará a obtener mejores beneficios de la deuda contraída. ¡A educarnos más!